martes, 15 de junio de 2010

Avigdor Arikha (1929-2010)




La pintura de Arikha, sea el interior de una biblioteca, sea la vista desde una ventana, nos hace sumergirnos inmediatamente en el seno de lo visible, según ese entramado vivo y cálido que vemos al instante cuando entramos en un cuarto. La superficie de la tela se organiza de acuerdo a las leyes propias de la pintura, pero jamás rehusa la obediencia a la realidad visible.

Jean Clair, en Autoportrait au visage absente.

2 comentarios:

Iñigo Rezola dijo...

Tuve la suerte de "encontrarme" con su obra en el British Museum hace unos años y pude ver sus carboncillos...

Icíar dijo...

Me gusta muchísimo.